top of page

SIEMPRE CUIDARÁ DE TI

  • ceinte
  • 19 mar 2022
  • 3 Min. de lectura

El libro de Salmos es uno de los textos más hermosos que se encuentran en el Antiguo Testamento, son 150 poemas o alabanzas a Dios cuya autoría se adjudica principalmente tanto al Rey David como a su hijo el Rey Salomón. Uno de los salmos más bonitos es el número 23, mismo que contiene una promesa del Dios vivo que nos ama, somos sus hijos y cuida de nosotros de tal forma que a nada debemos temer y nada podrá faltarnos cuando tenemos verdadera fe y amor en ÉL.


Las primeras líneas del salmo dicen: “Jehová es mi pastor; nada me faltará. En lugares de delicados pastos me hará descansar; Junto a aguas de reposo me pastoreará”, en el texto bíblico se hace muchas veces referencia a las ovejas como símbolo que representa a cada uno de nosotros hijas e hijos de Dios quien es nuestro Pastor, el cual vela por cada uno de forma amorosa, personal, sin límites ni condiciones, es por ello que cuando el autor de este salmo se refiere al Dios como nuestro Pastor, es Dios mimo quien se manifiesta y nos hace conocedores de su amor y su protección en la certeza de que NADA nos faltará cuando estamos en el rebaño del Creador, bajo su amor, voluntad y custodia, en la cual además nos asegura que vivimos en santa calma y paz en nuestro camino terrenal y en abundancia de bendiciones tanto materiales como espirituales siendo éstas últimas las indispensables.


Continuando con el salmo, dice: “Confortará mi alma; Me guiará por sendas de justicia por amor de su nombre. Aunque ande en valle de sombra de muerte, No temeré mal alguno, porque tú estarás conmigo; Tu vara y tu cayado me infundirán aliento.” Esta parte nos dice que el camino terrenal podrá estar expuesto a situaciones de dolor, tristeza o desgracia, sin embargo, Dios fortalece el alma para poder sobreponernos a cualquier circunstancia adversa, confiados en su infinito amor, por otra parte cuando los juicios están basados en la voluntad de Dios y su gracia, la justicia sin duda es nuestra compañera y ello nos dará la certeza que no debemos temer a nada, ya que nuestras acciones basadas en lo bueno y justo, son protegidas por el Altísimo y Todopoderoso por lo tanto el mal no puede alcanzarnos y saldremos bien librados de cualquier dificultad.



Por último, el salmo dice: “Aderezas mesa delante de mí en presencia de mis angustiadores; Unges mi cabeza con aceite; mi copa está rebosando. Ciertamente el bien y la misericordia me seguirán todos los días de mi vida, Y en la casa de Jehová moraré por largos días.” Esta parte nos dice que cuando estamos verdaderamente de la mano de Dios, aunque los enemigos deseen vernos mal o en situación de pobreza o infelicidad, Dios prepara todo para que nuestra vida este llena de abundancia y felicidad; por otra parte, la unción es un simbolismo de nuestro reconocimiento como hijos suyos y como símbolo también de salud y sanación, así como la promesa de su protección que da calma y paz a los pensamientos que pueden aturdir nuestra mente. Y por último las promesas más bellas, cuando has decidido poner tu vida en las manos de Dios con tu corazón sincero y verdaderamente aceptas su voluntad, Él promete que nuestra vida será guiada y bendecida por el Sumo bien que es Él mismo y por su perdón que es su misericordia, pero además nos asegura que en esta vida viviremos por largo tiempo, pero, sobre todo, podremos alcanzar la Gloria de la Vida Eterna.


Somos ovejas indefensas, y pequeñas en un mundo inmenso con grandes necesidades y peligros, pero cuando confiamos en el Pastor, no tenemos por qué preocuparnos o temer, pues TODO lo tenemos en ÉL.


Jesús, también hizo está analogía en la parábola donde habla de que por una oveja perdida de dejas a las 99 para encontrar a la que se ha ido, todos y cada uno de nosotros somos importantes para Dios, no hay nadie que sea olvidado o ignorado por Él de tal forma que si alguno de nosotros se ha desviado del camino, no hay duda que Dios no dejará de buscar su regreso al rebaño, para continuar cuidando de esa oveja junto con todas las demás a las que ama sin fin, somos ovejas sencillas y humildes, amparadas por un Dios maravilloso y perfecto.


El AMOR DE DIOS ES INCOMPARABLE Y ES EL ÚNICO TESORO QUE VALE LA PENA BUSCAR EN NUESTRA VIDA.


¡Gloria a Dios Padre, Dios Hijo y Dios Espíritu Santo!








 
 
 

Comments


Publicar: Blog2_Post

Formulario de suscripción

¡Gracias por tu mensaje!

  • Facebook

©2021 por Encuentro con Dios. Creada con Wix.com

bottom of page